Cruz Roja Española se fundó el 6 de julio de 1864, impulsada por Nicasio Landa y Joaquín Agulló, marqués de Ripalda. Inicialmente participó en acciones humanitarias en diversos conflictos bélicos y, paulatinamente, fue creando una red de hospitales que prestaron un servicio público inestimable.

El Real Decreto de 26 de agosto de 1899 reorganiza la Sección Española de la Asociación Internacional de la Cruz Roja creando la Asamblea Suprema como órgano de representación de la entidad. Incorpora, tambien, la figura del Delegado Regional y establece Comisiones Provinciales y Locales, dirigidas por el correspondiente delegado. Instituye, por último, la Sección Central de Señoras, así como secciones provinciales y locales.

El Real Decreto de 7 de diciembre de 1907 concedió franquicia a la Asamblea Suprema de la Cruz Roja, a sus delegados regionales, a sus delegados especiales y a las comisiones provinciales, de partido y locales.

El Real Decreto de 28 de marzo de 1916 otorga franquicia a la Asamblea Central de Señoras de la Cruz Roja y a las Juntas Provinciales. El Real Decreto de 7 de febrero de 1918 amplia la franquicia a las Juntas Locales.

El Decreto de 13 de octubre de 1931 crea un Comité Central, en substitución de la Asamblea Suprema, y en su artículo 13 determina que "en cada localidad donde exista un número suficiente de socios de la Cruz Roja, y en Madrid, en cada distrito o reunión de varios de ellos, se constituirá un Comité local". El artículo 15 crea la Comisión permanente, como delegada del Comité Central, y de ella "dependerán todos los servicios y Establecimientos organizados por ella".

Durante la Guerra Civil se formaron dos estructuras, una fiel a la República y otra participada por partidarios de la sublevación militar.

La Orden 212 de la Junta de Defensa Nacional, de 29 de septiembre de 1936, otorga franquicia a los centros de la Cruz Roja para servicio de información a las familias de combatientes.